¿Cuáles son los efectos del azúcar en nuestro cuerpo?

El azúcar es una sustancia esencial para la vida, además de ser parte de los alimentos más placenteros. Sin embargo, este compuesto es un arma de doble filo, por lo que, debes tener cuidado al consumirlo. Por este motivo, hoy te mostraré todo lo que debes de tomar en cuenta respecto a lo que representa el azúcar en tu funcionamiento.

Pero, ¿ Qué es el azúcar en nuestro cuerpo?

Esta no es más que un azúcar simple que se encuentra en la sangre. Se puede obtener la misma a través de los alimentos, específicamente los carbohidratos. Este tipo de sustancias se encuentra presente en las harinas, frutas, en el arroz y, por supuesto, en los dulces.

Cuando comes, los alimentos son descompuestos en sustancias que el organismo puede utilizar. Por lo que, los carbohidratos se transforman, entonces, en la glucosa; esta posteriormente se transformará en glucógeno, lo que será una reserva energética que se almacenará en el hígado.

¿ Cuál es el funcionamiento del azúcar en nuestro cuerpo?

El azúcar o glucosa constituye la principal fuente de energía del cuerpo, pues esta mantiene las funciones vitales como la regulación de la temperatura, la respiración o los latidos del corazón, entre otros. En sí, esta molécula es la que se encarga de dar energía a todo tu cuerpo. Así, tal cual como la gasolina permite ya un auto se mantenga en funcionamiento, la glucosa lo permite al organismo.

Los efectos nocivos del azúcar

Las enfermedades dentales. Como por ejemplo las caries, se relacionan con el azúcar, ya que éste ayuda a las bacterias de la boca a que destruyan el tejido dental.

La obesidad. Su elevado consumo ha sido uno de los causantes del aumento de la prevalencia de la obesidad en los últimos años. La obesidad, del mismo modo que el sedentarismo, son factores de riesgo de la diabetes.

Enfermedades cardiovasculares. El azúcar es uno de los factores de riesgo para la aparición de estas enfermedades.

Hígado graso. Si se mantiene un consumo elevado de azúcar se incrementa la síntesis de grasa en el hígado que, de mantenerse, puede resultar en hígado graso.

Empeora el rendimiento del cerebro. Según el endocrinólogo Robert Lustig, quien afirma que los procesos de memorización y aprendizaje tienden volverse más lento en aquellas personas que consumen azúcar, esta sustancia empeora el rendimiento del cerebro.

Reduce la sensación de saciedad. Esta sustancia activa las zonas de placer del cerebro, lo que provoca que disminuya la sensación de estar satisfecho al ingerir alimentos.

Acelera el envejecimiento. Disminuye la reparación del colágeno, que es la proteína que proporciona un aspecto saludable y juvenil a la piel.

Daña los tejidos. El consumo de esta sustancia acelera el proceso de oxidación de las células. Lo que puede provocar que se desarrollen enfermedades hepáticas, insuficiencia renal y cataratas.

Crea adicción. Consumir azúcar conduce a la liberación de dopamina, esta es el neurotransmisor que provoca querer más de la sustancia que produce el placer.

Baja la energía. Si bien el consumo de glucosa, causa una sensación de energía, hay que tener en cuenta que esto es sólo un efecto breve, ya que seguido viene la caída de esta energía causando un gran agotamiento.